¿Dónde vamos a comer hoy?
¿Qué serie miramos?
¿Qué zapatos me pongo?
¿Vamos al gimnasio? ¿O a la sauna?
¿Con quién decidimos ir al teatro? ¿O a cenar?
Esta semana he estado reflexionando sobre la abundancia.
Vivimos en un mundo con infinidad de opciones con las que gastar nuestro dinero y dedicar nuestro tiempo.
Y ello, a veces, tanto como personas, consumidores o profesionales, nos lleva a tomar un gran número de decisiones durante el día. Pero… ¿Hasta qué punto nos preguntamos si nuestras decisiones han sido o no óptimas?
Tomar decisiones no es nada fácil. Y aunque no lo parezca, el ser humano toma alrededor de 35.000 decisiones al día. Y eso… es una barbaridad.
Aprender a tomar decisiones de forma correcta (vamos a decir, un 70% de estas 35.000) es algo con lo que deberíamos de poner el foco de manera constante. Cuánto mayor sea el número de decisiones acertadas, mejor nos debería ir y ello nos acercará a los objetivos de vida que cada uno de nosotros tiene.
Hoy hablaremos de la teoría de juegos y cómo Trump utiliza esta teoría para tomar decisiones para el beneficio de Estados Unidos. Además, también veremos cómo grandes inversores utilizan la práctica de tomar decisiones (en este caso concreto jugando a póker) para tomar mejores decisiones de inversión.
Here we go!
Teoría de juegos
La teoría de juegos es una rama de la economía que estudia la toma de decisiones estratégicas en situaciones donde el resultado de una decisión depende no solo de una de las partes, sino también de las decisiones de otros. Se puede aplicar en los mercados financieros, en los negocios, en política o incluso… ¡Para negociar tu salario el próximo año!
Hay diferentes conceptos clave para entender la teoría de juegos:
Equilibrio de Nash. Imagínate dos empresas que tienen un duopolio sobre su mercado con una cuota del 50% cada una de ellas. Teniendo en cuenta que tienen los mismos márgenes, si una de ellas baja los precios con el objetivo de conseguir más clientes, lo que hará la competencia es seguir su bajada de precios, teniendo como resultado final un descenso de los beneficios para ambas empresas. El equilibrio de Nash se enfoca en ello: un estado donde ningún agente tiene incentivo a cambiar su estrategia porque ya está tomando la mejor decisión teniendo en cuenta las decisiones ya tomadas por los demás. Os dejo con una escena que me encanto de la película “Una mente maravillosa” (la cuál relata la vida de John Nash, de él el nombre de Equilibrio de Nash que le hizo obtener un Premio Nobel de economía) que representa el concepto a través de una situación cotidiana:
Juegos de suma cero o suma positiva. La suma cero sería que un jugador lo gana todo y el otro lo pierde todo. Sería el caso del póker o cualquier deporte en general. El de suma positiva es que ambos jugadores ganan o pierden juntos (guerra de aranceles por ejemplo).
El dilema del prisionero. Un juego donde dos jugadores pueden cooperar o traicionar al adversario. La opción racional para cada uno provoca un peor resultado final para ambos. Lo ideal sería cooperar aunque en un mundo con información asimétrica ello es muy difícil. Nunca hubiera pensado compartir vídeos de Jordi Wild en Financial District pero esta entrevista, la cuál me encanto, explica a la perfección dicho dilema:
Información perfecta o imperfecta. En el ajedrez ambos jugadores conocen todas las jugadas realizadas (información perfecta), mientras que por ejemplo no es así en los mercados financieros y muchos gestores toman decisiones sin saber qué están haciendo los otros agentes del mercado (información imperfecta).
No quiero que este sea un artículo de puramente teoría de juegos, pero si que me gustaría generar curiosidad por el concepto entre todos los suscriptores de Financial District, ya que creo que es un tema de interés del cuál podemos aprender muchas cosas y sacar rédito de ello en nuestro día a día. Para saber más de ello, os dejo con un vídeo resumen de los conceptos y diferentes situaciones donde podremos aprender a tomar mejores decisiones para nosotros en base a lo que decidan agentes externos:
El resumen: piensa en el resultado que interesa a ambas partes y actúa en base a ello para beneficiarte a ti mismo.
Déficit comercial, aranceles y el poder de negociación de Donald Trump
La semana pasada vimos cómo Trump anunció nuevos aranceles para México y Canadá. De hecho, ello no debería de sorprender a nadie ya que en su programa ya avisaba de una subida de aranceles generalizada para todos los socios comerciales de Estados Unidos. Si nos fijamos en el siguiente gráfico, podemos apreciar el verdadero impacto de la propuesta del nuevo Presidente: ¡Subir los aranceles versus el valor de sus productos a niveles de 1936! Una auténtica barbaridad.
¿Por qué aranceles? Es la pregunta por la que uno debe empezar. Estados Unidos tiene un déficit comercial estructural. Eso significa que importa más bienes y servicios de los que exporta, siendo altamente positivo para sus socios comerciales (así como para sus consumidores) y altamente negativo para… la industria del país. Para poner datos sobre la mesa, el déficit anual en 2023 fue de casi $800B.
¿Por qué Estados Unidos tiene este déficit? Pueden existir varios motivos, aunque para servidor destacan los siguientes:
Fortaleza del dólar; lo cuál hace las exportaciones del país más caras y las importaciones más baratas, lo cuál contribuye a ampliar el déficit.
Deslocalización de la producción; muchas empresas del país producen fuera (China, México,...) para luego importar dichos productos a su propio país.
Estructura productiva; Estados Unidos tiene mucho más enfoque en los servicios (finanzas, ocio, tecnología,...) que en productos manufacturados, lo que aumenta las importaciones de bienes físicos.
Crecimiento económico; alto gasto público y de consumo han hecho que la primera economía mundial siga creciendo a buen ritmo, ello aumentando el ritmo de las importaciones para abastecer toda su demanda actual de ciertos productos más baratos y/o especializados (coches de Japón o de Europa, por ejemplo).
¿Qué países se benefician del déficit de USA? Si Estados Unidos tiene un déficit comercial, significa que otros socios tienen un superávit. China, México y Europa son los principales socios que se aprovechan de ello. Y ojo, porqué aunque para Europa aún no ha habido anuncios oficiales de aranceles… pronto los tendremos.
¿Es realmente un problema el déficit comercial? No necesariamente. Aunque dicho déficit perjudica a la industria manufacturera estadounidense, importar productos permite a los consumidores norteamericanos consumir bienes más baratos y mantener su nivel de vida actual, además de disfrutar de productos que, según cada uno, les ofrece una utilidad mayor en relación calidad/precio.
Pros y contras de los aranceles. Centrémonos en ello. Los aranceles son impuestos que un país impone a un socio comercial a los bienes importados desde su región, y todo ello lleva consigo ciertas consecuencias tanto positivas como negativas para un país.
A favor de los aranceles:
I) Protección a las empresas industriales nacionales.
II) Generación de ingresos fiscales.
III) Reducción del déficit comercial.
IV) Fomento del empleo local.
En contra:
I) Incremento de precios para los consumidores.
II) Incremento de costes para las empresas nacionales.
III) Mayor inflación.
IV) Protección de empresas e industrias ineficientes a nivel nacional y que, sin competencia internacional, perjudican la innovación y la competitividad del país.
Entonces… ¿Le interesa a Estados Unidos subir sus aranceles? No. No. Y no. Y menos aún los aranceles anunciados del 25% para México y Canadá y del 10% a los productos chinos.
Estados Unidos tiene actualmente una inflación del 3%. Cada vez está más apalancado. Y cada vez paga más por su deuda. Todos pudimos ver las consecuencias de una inflación descontrolada en 2022 y el impacto que tiene una subida de tipos por parte de la Reserva Federal para todos los agentes del mercado estadounidense (consumidores, inversores, empresas, trabajadores,...). Unos aranceles tan elevados a sus principales socios comerciales solamente haría empeorar aún más su situación en términos de inflación y tipos. Y NO. A NADIE LE INTERESA. Y TRUMP, LO SABE.
¿Por qué Trump haría algo que sea perjudicial para él y Estados Unidos? ESTE es el motivo del artículo de hoy: PORQUÉ DONALD TRUMP DOMINA A LA PERFECCIÓN LA TEORÍA DE JUEGOS.
A Estados Unidos no le interesa poner aranceles. Perjudicaría gravemente a su economía. Pero es que el impacto que tendrían dichos aranceles en las economías de sus socios comerciales sería AÚN PEOR. Y, ¿Os acordáis del resumen de la teoría de juegos? Piensa en el resultado que interesa a ambas partes y actúa en base a ello para beneficiarte a ti mismo.
A Trump no le interesan los aranceles. Pero es que a sus socios, menos. Por lo que, ¿Qué mejor que anunciar aranceles y llamarles para una reunión? Jaque, mate. Cuando sucede dicha reunión, todo es muy fácil para el actual presidente de Estados Unidos. Si los aranceles siguen en pie, el presidente que se encuentra en el otro lado de la mesa pierde más que Trump (y seguramente su carrera como político se vería acabada), por lo que accederá a aceptar cualquier cosa que Trump le pida con el objetivo de que los aranceles NO acaben llegando. Por eso tanto México como Canadá han aceptado intensificar sus esfuerzos en las fronteras en la lucha contra el tráfico de drogas (en especial fentanilo) y fortalecer la seguridad en la frontera (evitando la entrada de inmigración ilegal a USA).
Así que estamos delante de una situación dónde con solo un anuncio de aranceles, Trump consigue que sus actuales socios comerciales destinen más recursos para el beneficio de la seguridad nacional de Estados Unidos.
Extra: El póker y su relación con los mercados financieros
Si Trump no toma riesgos, no obtiene beneficios.
Aunque el “farol” de los aranceles conllevaba muchos riesgos, el mercado ha confiado en sus cartas.
Lo mismo nos sucede a nosotros como inversores.
Y a los traders, en Wall Street o en la City.
Sin riesgos, no hay beneficios.
Y entender qué nivel de riesgos uno puede o no tomar, es esencial para el éxito en los mercados financieros.
Además de entender el mercado y las decisiones de los otros agentes que participan en él.
Saber qué información tienes tú que ellos no. Y qué información tienen ellos de la cuál tú careces.
Os dejo con esta joya de The Wall Street Journal.
De la mesa de póker al parqué: dentro de la mente de los traders de Wall Street.
Esto es todo por hoy.
Como siempre, un placer.
Miquel Cantenys
Cada vez que lo leo me gusta mas este argumento. Gracias x tus escritos, son geniales.